Con el fin de contribuir a mejorar la calidad de vida de las comunidades donde ejerce influencia, Coposa ha venido desplegando una intensa labor social a lo largo de estos 9 meses del año, beneficiando a más de 3.000 personas, de forma directa y otras 10 mil, de manera indirecta.
El gerente de Gestión Humana, José Avilés aseveró que “la responsabilidad social constituye un tema estratégico para la empresa”, al tiempo que resaltó el compromiso recibido por el talento humano, quienes se han sumado en apoyo a la causa social.
Entre las actividades realizadas, Avilés mencionó la instalación de un parque biosaludable en la comunidad “12 de Octubre” de Las Palmas de Araure, en Acarigua, el cual benefició a más de 1.000 niños y 800 adultos de esa zona. El lugar cuenta con un área destinada a eventos culturales, con aparatos para el disfrute de los infantes y equipos para la práctica de ejercicios para los adultos.
Siempre en el perímetro regional, la empresa restauró el Centro Educativo Simoncito Payara, obra que hoy disfrutan cerca de 250 niños en edad preescolar. Los trabajos incluyeron la reparación de baños, pintura de salones, instalación de un tanque de agua y la reactivación de todas las tuberías de aguas blancas, permitiendo una mejor cobertura de atención de la comunidad estudiantil.
En Caracas, se realizó un taller de panadería y pastelería para emprendedores en el ramo de la alimentación, así como también la III edición de los Chef-Citos, dedicado a impulsar el arte culinario en los niños.
Durante el mes de junio y aprovechando la temática del mundial, 200 alumnos, entre 6 y 12 años de la escuela básica San Francisco Javier, ubicada en La Pastora, en Caracas, disfrutaron de múltiples actividades deportivas, las cuales fueron acompañadas de un refrigerio y obsequio, por parte de Coposa.
Sumó a la iniciativa social, la visita a la Casa Hogar Alí Primera de Acarigua, la cual alberga a niños, desde 6 meses hasta los 12 años, desvinculados de su medio familiar por haber sido víctimas de abuso, amenaza o violación de sus derechos en situación de abandono. En compañía de los trabajadores de Coposa, los pequeños disfrutaron de una mañana diferente con pinta caritas, baile y globo- manía, además de compartir un sustancioso desayuno.
Más tarde, tocó el turno a la Fundación Raúl Alfredo Silva, Amigos Contra el Cáncer, que atiende a niños con esa enfermedad. “Los ayudamos con medicinas y hospedaje para algunas de las familias que no cuentan con recursos. Así mismo, en Caracas, promovimos una visita en la Fundación Amigo del Niño con Cáncer”, acotó Aviles.
Puertas adentro
El talento humano es fundamental para Coposa; de allí que sigue apostando a la formación y crecimiento de sus trabajadores para fomentar el compromiso recíproco; además de ser parte del acompañamiento, en cuanto al apoyo en la adquisición de productos de la cesta alimenticia de los colaboradores y su familia.
Entre las diversas actividades realizadas figuran, el reconocimiento a los empleados con permanencia entre 5 a 35 años de servicio; a nivel deportivo, la participación en distintas disciplinas, de 300 trabajadores, en los Juegos Interdepartamentales.
En materia cultural y de esparcimiento, resultó un éxito las visitas guiadas para hijos de los trabajadores al Museo de Arte Acarigua Araure, en las que asistieron 120 niños; además del concurrido plan vacacional, con 200 asistentes.
Finalmente y, al referirse a las acciones que desarrolla la empresa, Antonio Rodriguez, presidente de la empresa señaló “la responsabilidad social empresarial representa una temática actual dentro del ámbito organizacional y académico del país. Integra los valores, las creencias y las actitudes que asumen los actores que hacen vida dentro de las organizaciones, cuando están conscientes sobre el valor social que pueden generar en sus comunidades”, concluyó.
