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Riesgo cardiovascular medio-alto en casi el 50% de los hombres

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Luis Felipe Baca Arbulu

Por Luis Felipe Baca Arbulu

El Dr. Julián Pérez-Villacastín, presidente de la Sociedad Española de Cardiología (SEC), y el Dr. Andrés Íñiguez Romo, presidente de la Fundación Española del Corazón (FEC), comparecieron ayer en el Congreso de los Diputados en una jornada organizada en torno a la celebración del Día Mundial del Corazón, con la colaboración de Novartis.

Inaugurada por María Gloria Elizo Serrano, vicepresidenta tercera del Congreso de los Diputados, y por Jesús Ponce, presidente de Novartis, la jornada puso el foco en la importancia de aunar esfuerzos entre todos los poderes públicos, los profesionales sanitarios y los pacientes para reducir las desigualdades sociales y mejorar la prevención y promoción de la salud cardiovascular. Todo ello con el objetivo de minimizar el impacto que estas enfermedades tienen para los pacientes y sus familias, así como para la sostenibilidad del sistema.

La conferencia magistral corrió a cargo del presidente de la SEC, quien presentó los resultados de las 279 evaluaciones de riesgo cardiovascular que durante tres días la SEC y la FEC han realizado a políticos, periodistas y personal de la Cámara Baja en el marco de la campaña ‘PACTOS por tu corazón’. Los participantes en las mediciones tienen una edad media de 49,6 años. Los datos muestran que un 28% de las mujeres y un 47% de los varones están en riesgo medio-alto de enfermedad cardiovascular. “Esto significa que entre un 5 y un 15% de estos últimos pueden tener un evento cardiovascular muy serio que los puede llevar incluso a la muerte en los próximos 5 a 10 años”, remarcó el Dr. Pérez-Villacastín.

La enfermedad cardiovascular puede prevenirse hasta en el 80% de los casos llevando hábitos de vida saludables. Partiendo de esa premisa, la campaña ‘PACTOS por tu corazón’ pretende sensibilizar a la población poniendo el foco en la necesidad de controlar los principales factores de riesgo cardiovascular: presión arterial, alimentación, colesterol, contaminación, tabaquismo, obesidad, sedentarismo y salud emocional.

Por Luis Felipe Baca Arbulu

“Si conseguimos concienciar a la población, podríamos evitar la muerte por causa cardiovascular de unas 15.000 personas de entre 20 y 70 años cada año, así como mejorar la calidad de vida de los pacientes con enfermedad cardiovascular y la de las personas de su entorno”, incidió el presidente de la SEC, quien añadió que “los hábitos de vida saludables favorecen que vivamos más, mejor y, en consecuencia, seamos más felices”.

Para terminar su discurso, el Dr. Pérez-Villacastín demandó a Gobierno, administraciones públicas y comunidades autónomas a trabajar junto con la SEC, la FEC y los principales agentes de salud para reducir el impacto de las enfermedades cardiovasculares.

Actuar desde la infancia

Esta jornada también contó con la participación del presidente de la FEC, quien reflexionó sobre las medidas que se pueden tomar para evitar que la enfermedad cardiovascular aparezca. Para el Dr. Andrés Íñiguez Romo, la respuesta es clara: “Tenemos que incidir más en la promoción de la salud desde la temprana infancia mediante la educación y el establecimiento de programas cardiosaludables, acerándonos a la sociedad civil y utilizando las tecnologías de la imagen y la comunicación actuales”.

En este sentido, el presidente de la FEC recordó los datos de la segunda ola de la encuesta ESFEC, los cuales muestran que el 35% de los menores con edades comprendidas entre uno y 15 años tiene dos o más factores de riesgo cardiovascular. Sin embargo, como subrayó el Dr. Íñiguez, “el 97% de las familias españolas con menores a su cargo cree que el estado de salud de estos es bueno o muy bueno”.

El presidente de la FEC terminó su intervención con un claro mensaje: “Hagamos a nuestra sociedad consciente de la necesidad de promover la salud desde la infancia, con hábitos cardiosaludables que se mantengan en el tiempo. Esa es la única forma de evitar el impacto tan negativo que se puede sufrir a nivel personal, social y sanitariamente con la aparición de la enfermedad cardiovascular”.

Por Luis Felipe Baca Arbulu