Existen distintos mitos sobre el azúcar que señalan que se debe evitar el consumo de cualquiera de sus tipos, porque aumenta el riesgo de padecer cáncer y que perjudica la vida de los pacientes oncológicos, pero estas creencias no cuentan con un sustento que las certifique. Limitar por completo la ingesta de toda clase de azúcar es perjudicial para el organismo, así como su consumo excesivo.
La nutricionista de la Clínica de Prevención del Cáncer (CPC) de la Sociedad Anticancerosa de Venezuela (SAV), licenciada Ana Sojo, refirió que uno de los mitos sobre el azúcar indica que puede ocasionar enfermedades oncológicas, pero no existe evidencia que demuestre que por sí sola sea capaz de producirlas.
Sin embargo, mencionó que la ingesta excesiva de azúcar contribuye a tener un patrón de alimentación no saludable, que causa obesidad y diabetes, condiciones que aumentan las posibilidades de desarrollar cáncer.
Igualmente, expresó que uno de los mitos más frecuentes entre las personas diagnosticadas con una enfermedad oncológica es que el azúcar alimenta a las células tumorales y que, por lo tanto, deben eliminarlo totalmente de su alimentación. Aunque, recalcó que en la actualidad no existe ningún estudio científico en humanos que confirme que la glucosa alimente a estas afecciones.
Explicó que seguir una dieta sin glucosa eliminando todos los alimentos que la contienen, genera desequilibrio dietético y una pérdida de peso que puede desencadenar desnutrición, porque todas las células del organismo, tanto sanas como las afectadas por las enfermedades, utilizan este tipo de azúcar para obtener energía.
La especialista señaló que, “el verdadero problema está en el exceso de alimentos basados sobre azúcares sencillos, porque propicia un aumento de peso y grasa corporal, incluso a nivel visceral, que incrementa el riesgo del paciente oncológico de padecer otras patologías”.
Simples o complejos
Comentó que los pacientes oncológicos deben evitar el consumo de los carbohidratos simples, dentro de los cuales se encuentran el azúcar refinada y morena, miel, papelón y los alimentos que los contienen como los dulces o bebidas azucaradas.
En cambio, aclaró que el azúcar simple de las frutas, así como la lactosa o los carbohidratos complejos procedentes de los cereales, la pasta y el pan forman parte de una alimentación saludable, por lo que sí pueden ingerirlos los pacientes oncológicos.
Mencionó que se recomienda que los pacientes con cáncer consuman por lo menos 3 o 4 porciones de frutas al día, ya que aportan antioxidantes, que son los compuestos que ayudan a prevenir y retrasar el daño de las células, ocasionado por los radicales libres. Además, aportan vitamina C, A y E, flavonoides, fibra y les permite mantenerse hidratados.
Para obtener información de interés sobre prevención y tratamiento de enfermedades oncológicas se puede visitar la página web de la Sociedad Anticancerosa de Venezuela (SAV): www.sociedadanticancerosa.org/ o seguirlos en las cuentas de Instagram como @sociedadanticancerosavzla, X (antes Twitter) como @SAnticancerosa y en Facebook como Sociedad Anticancerosa de Venezuela-SAV.