En un mundo donde la tecnología es fundamental, las fluctuaciones de voltaje pueden ser un enemigo silencioso para nuestros valiosos dispositivos. Los protectores de voltaje con ciclo de espera emergen como héroes anónimos, defendiendo nuestros electrodomésticos y equipos de oficina de daños irreparables. Estos guardianes de la corriente eléctrica no solo preservan la vida útil de nuestros aparatos, sino que también protegen nuestras finanzas de las consecuencias de un fallo eléctrico.
Un dispositivo de protección de voltaje supervisa activamente la corriente eléctrica, para forzar el apagado de los aparatos conectados a él ante fluctuaciones peligrosas y restableciendo la energía cuando es estable. Por lo general, al volver la corriente al sistema eléctrico, puede regresar con voltaje por debajo o por encima del rango normal, la mayoría de las veces el voltaje es más bajo, y esto es precisamente lo que daña los aparatos conectados, aun cuando estén apagados.
Estos protectores o reguladores de voltaje pueden ser: ajustables y Smart o inteligentes. De acuerdo con el ingeniero Alfredo Gómez, ex profesor de la Universidad Experimental Politécnica Antonio José de Sucre (Unexpo) y asesor de la empresa Pickens, los protectores Smart o inteligentes son dispositivos eléctrico – electrónicos que “poseen un ciclo de espera que no permite el reinicio del funcionamiento hasta que la tensión eléctrica se normalice según las necesidades del aparato conectado. Ese ciclo de espera, o tiempo de reconexión variable funciona según las necesidades del aparato, para aquellos dispositivos que requieran un enfriamiento antes de volver a funcionar, como es el caso de los aires acondicionados”.
Explicó Gómez que “los protectores Smart o inteligentes vienen previamente graduados desde fábrica, en los valores máximos y mínimos de tensión (eléctrica), que harían que el dispositivo de Pickens actúe frente a una variación inesperada del voltaje normal de funcionamiento del equipo protegido. Es decir, en esta clase de protectores no podemos ajustar los valores de accionamiento de ellos, ya que esto viene establecido desde su fabricación, en su lógica de funcionamiento”.
Por su parte, los protectores de voltaje ajustables tienen perillas que le permiten al usuario regular los valores de voltaje mínimo y máximo, así como el tiempo de espera para la reconexión, de acuerdo con la zona donde se encuentre y con los aparatos que serán conectados.
Protección configurable
El asesor de Pickens destacó que tanto los protectores de voltaje Smart como los ajustables tienen un ciclo o tiempo de espera, que puede ser variable entre los 5 a los 300 segundos, pero la diferencia es si ese valor se fija manualmente por el usuario o está preestablecido en el dispositivo.
Indicó que “todos los reguladores de ciclo de espera tienen un tiempo de reposición, que puede ser colocado a gusto del usuario en los equipos ajustables de perillas, o puede ser previamente establecido desde fábrica en los equipos Smart. Pero, en todo caso, siempre vamos a tener un ciclo de espera o reposición del dispositivo”. Los equipos de refrigeración, por ejemplo, requieren un ciclo de espera de más duración (de 5 minutos), ya que usan componentes internos como gas y aceite que deben empezar a circular antes de que el equipo se encienda completamente.
Todos los protectores de voltaje de Pickens tanto los Smart como los ajustables tienen 5 años de garantía, son ecológicos y están elaborados con materiales anti fuego
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