La solidaridad llegó a las calles de Acarigua para beneficiar a los niños de la Casa Hogar Ali Primera y la Fundación Raúl Alfredo Silva, Niños con Cáncer, quienes recibieron donativos por parte de los trabajadores de COPOSA, además de disfrutar de actividades recreativas.
Productos de la dieta básica, artículos escolares, deportivos y de higiene personal, además de juguetes, fueron entregados por la empresa a estas instituciones sociales que hacen vida en la región, desde hace muchos años.
La primera parada fue en la Casa Hogar Alí Primera, la cual alberga a niños, desde 6 meses hasta los 12 años, en situación de abandono. Allí, los pequeños disfrutaron de una mañana diferente con pinta caritas, baile y globo- manía, además de compartir un sustancioso desayuno.
Posteriormente, los trabajadores de Coposa se trasladaron a la Fundación Raul Alfredo Silva, Amigos Contra el Cáncer, organización que, desde el 2009 se dedica a ayudar a los pacientes oncológicos de menor edad, cubriendo sus gastos médicos, de alimentación y acompañamiento en todos los aspectos de la enfermedad. Aquí, las actividades recreativas y la diversión lograron dibujar una sonrisa en los protagonistas de esta gran fiesta.
Norlys Silva, directora de este centro benéfico, manifestó su satisfacción por el apoyo que viene brindando Coposa desde hace 9 años a la fundación. “Sin duda un buen ejemplo a seguir por el resto del empresariado, que bien vale la pena. Con este gesto, Coposa logró devolverle la sonrisa a los niños, que hoy atraviesan momentos especiales de salud”.
Para Jose Aviles, gerente de Gestión Humana la misión de Coposa “es dejar una huella valiosa en las comunidades, a través del trabajo que desarrollamos. En este caso, el estar cerca de instituciones sociales es un paso adelante que damos para poder atender algunas de sus necesidades, y hacerles ver que en Coposa somos una empresa que creemos y desarrollamos firmemente la responsabilidad social como un derecho, más que como un deber”.
